viernes, 3 de octubre de 2014

En un utópico concierto

Con la depresión postconcierto que alcanza la semana me veo en la difícil encrucijada de "contar un concierto" vs. "como me gustaría que fuese un concierto". Creo que el título deja claro por lo que me he decantado...




1. Las filas, por orden de estatura. Casi seguro que estoy en primera fila
2. Una puerta adivinadora del futuro que sepa quién va a ser el (los) cafre(s) de turno. Y que no pasen. Por alguna extraña razón, siempre están a mi lado.
3. Me sé todas las canciones. Incluso las nuevas que aún no están en ningún disco.
4. No existe el dolor de pies.
5. No existe el hambre ni la sed.
6. No existe el cansancio.
7. Por mucho que cante, grite y chille, no estaré afónica al día siguiente.
8. Al acabar, mágicamente, apareceré en mi cama.
9. La entrada no me ha costado un riñón.
10. No hay parejas babosas a mi lado ni en mi campo de visión.
11. El que siempre baila no molesta.
12. El supuesto entendido en música y conocedor del grupo o cantante mejor que su madre está en última fila. Y calladito.
13. No pierdo a mis amigos.
14. No hay móviles. Nada de WhatsApp, Facebook o Twitter. Limitaos a disfrutar del concierto, coño ya.
15. Nunca jamás de los jamases me pisan, empujan , golpean y/o arrasan.






No hay comentarios:

Publicar un comentario